lunes, 20 de octubre de 2008

Máquina del tiempo


inevitable... caer en la nostalgia, cuando hablas con alguien que te recuerda lo que hacías cuando tenías 3 años... 10 años...

nos confesamos en casa de angela, todos con las manos al centro, lo que dijeramos ahí no iba a salir de ese círculo... claro, no tenía cómo salirse! no había mucho más exterior! por muchos años ibamos a ser solo nosotros, no más de 10 niños de 10 años que crecieran juntos y jugaran mancha caño o a las luchas en el pasto...
hasta que crecimos, y nos dimos cuenta que esas luchas ya no eran juegos de niños, sino que pasaban a ser peligrosamente abrazos adolescentes...
Y seguimos creciendo, no hay como ponerle un stop, y aún no hay máquina del tiempo martín!, aunque cuando se invente, toda la patente te pertenece!
creo que lo único que no cambia de esa foto a hoy, 30 años después, es q me sigue gustando el color verde, y hoy tengo 4 pantalones como ese!

Crecemos por dentro y por fuera, claro que el que se ve más y el que gusta menos es el pasar del tiempo externo. Y el de adentro? pues, el de adentro está bueno, la mayoría de las veces se siente muy bien, pero hay algunas pocas veces que juega en contra, más que nada al querer encontrar pares, suena sangrón, pero es así, hay veces como que uno "crece de más" y las cosas suceden predeciblemente, son menos las sorpresas, pero... creo que puedo vivir con eso, al menos estoy en vías de...

miércoles, 15 de octubre de 2008

hija del cambio

Lo que observamos, no es la naturaleza en sí misma, sino la naturaleza expuesta a nuestro método de observación. Heisenberg.

Mi naturaleza epistémica, observada por otros, puede llegar a ser percibida como compleja y caótica.
Mi observación profunda e intrínseca logra alcanzar el núcleo, pero aún con mucha flexibilidad en mi pensamiento, todavía no logro romper con el paradigma de la necesidad de poner en palabras los sentimientos.
Por lo que, en un esfuerzo por aproximarme al conocimiento total, logro captar imagenes y energía. Imágenes poderosas, explosivas, que desprenden energía positiva, y ahora, de un tiempo a esta parte... sanadora.
Mi energía se transforma, se estabiliza... pero mi combustible sigue siendo el cambio...